
Madres negras: que nazca una tradición
Natalie D. Preston-Washington
Extraído de de Gratis para amamantar: voces de madres negras publicado por Praeclarus Press, utilizado con autorización.
Foto de : Jeanine-Valrie-Logan
No hay ningún legado de lactancia materna en mi lado de la familia. Soy hija única de mis padres y mi madre no me amamantó. Su hermana tampoco amamantó a su hija, lo que explica por qué mi tía era tan curiosa y atenta cuando yo amamantaba en su presencia.
¿Sigue chupando?
¿Duele?
¿Cuánto tiempo vas a amamantar?
¿Ha terminado?
Cada visita. Cada sesión de enfermería. La misma serie de preguntas.
Al principio me desanimó su extrema curiosidad. Luego, después de hablar con mi madre y enterarme de que “en aquel entonces” no se aceptaba la lactancia materna, lo entendí. Mi tía no lo había experimentado de primera mano y allí estábamos, en vivos colores, para que ella pudiera observarnos. A partir de ese momento vi sus consultas como una oportunidad para iluminarme.
Sí, todavía está amamantando. A veces se detiene un momento y luego continúa. Al principio me dolió cuando se aferró hasta que ambos descubrimos lo que estábamos haciendo. Ahora es fácil... Me comprometí por tres meses, luego por seis meses, ¿ahora quién sabe? No tengo prisa por darle a Luke leche de vaca o de alguna fuente artificial. Sí, está dormido. ¡Una sesión de enfermería exitosa!
Me parece interesante que los esclavos amamantaran a sus hijos y a los hijos de sus amos. Y supongo que las mujeres amamantaron durante los años de la depresión, aunque sólo fuera por motivación financiera. Sin embargo, la generación de derechos civiles de mi madre parece haber dejado caer el testigo durante los sexys años 70, cuando yo nací.
En 2011, las visitas a mi obstetra/ginecólogo no me convencieron de que la lactancia materna esté resurgiendo. Veo una clara delimitación entre las enfermeras y los nots.
Las familias deben ser la primera línea de apoyo en lo que respecta a la lactancia materna. Si una madre es capaz de producir leche, entonces se le debe educar, alentar y dotar de los recursos necesarios para amamantar. El hecho de que la leche esté disponible de otras fuentes no maternas a un costo mínimo o nulo es irrelevante.
Del mismo modo, como mujeres negras que amamantan, debemos esforzarnos por educar, alentar y permitir que otras madres amamanten. El hecho de que las otras madres no sean parientes o sean de una etnia diferente es irrelevante.